Invertir en la almendra, todo lo que debes saber

 

 

La almendra

Al principio, la plantación del almendro se cultivaba en pedregales y tierras que no se podían aprovechar para otros cultivos, pero hace ya más de una década el almendro se viene plantando en terrenos con la modalidad de regadío, lo que hace que su productividad sea considerablemente más elevada; esto se traduce en la obtención de unos importantes ingresos, llegando a duplicarse en la mayoría de los casos frente a la variedad de secano si tenemos los conocimientos adecuados para llevar a cabo tanto la plantación como los trabajos de mantenimiento de dicha finca o bien son realizados por una empresa profesional.

 

 

Datos de la almendra española

Sólo en Andalucía se cultivan alrededor de casi 200.000 hectáreas de este producto y su producción anual supera ya las 10.000 toneladas de almendra. La provincia andaluza que está en cabeza es Granada.

Es curioso el dato: siendo EEUU el mayor productor a nivel mundial de almendra, ya que copa el mercado con una producción del 85% y con tan sólo una superficie de alrededor a las 350.000 hectáreas, centralizada su mayor parte en California con 250.000 hectáreas y sin embargo, en España existe una posibilidad para el cultivo de este fruto de en torno al doble de superficie de lo hay en California, rondando las 650.000 hectáreas y sin embargo la producción de almendra es de tan sólo el 5% a nivel mundial.

 

Ventajas de la plantación de la almendra

A las campañas de publicidad de consumo de este producto promovidas sobre todo por el principal productor se le añaden la demanda continua de los países asiáticos como India y China por lo que el precio no para de crecer.

Actualmente existen variedades de este fruto que ya son autofértiles debido a las constantes investigaciones en este sector. Estas variedades no necesitan de otro árbol para que cuaje el fruto, dado que la hembra y el macho se encuentran en la misma planta. A su vez se han creado especialidades que por ejemplo retrasan su floración para que de esta forma poder evitar las heladas. A estas ventajas, se le une que la maquinaria que se utiliza en su recolección es prácticamente la misma a la que se utiliza en el olivar, por lo tanto, la inversión ya estaría hecha para el agricultor que decida invertir en la almendra. A ello, también hay que sumarle que la mano de obra en esta recolección es menor que la de la aceituna de mesa por ejemplo. Y a lo largo del año ocurre igual, la poda por ejemplo se realiza de una forma muy rápida y eficaz.

Otra ventaja a tener en cuenta tras su recolección es que su almacenaje es muy fácil y sencillo, al igual que su transporte y condiciones de temperatura.

 

Rentabilidad de la almendra

Sobre todo, aprovechando el alza de los precios se impone la plantación de cultivo en la modalidad que se denomina de intensivo o súper intensivo.

A partir del tercer año de la plantación, el almendro comienza a dar sus frutos que al menos sirven para pagar los costes del mantenimiento y parte de la inversión realizada.

A partir del quinto año de vida su producción ya es importante, y es en el séptimo y a partir de aquí cuando se llega a la plenitud de su producción elevándose exponencialmente.

La media en Andalucía ronda los 150 kilos por hectárea, sin embargo, con las nuevas implantaciones de modelos de intensivo o súper intensivo en la variedad de secano se logran recaudar unos 700 kgs. por hectárea, mientras que en la modalidad de regadío se llegan a obtener alrededor de unos 1500 kgs. por hectárea de terreno. 

El kilo de aceituna de mesa con la recolección en la temporada del verdeo no llega al euro por kilo, mientras que el kilo de almendra ha llegado a pagarse a 7 y 8 euros el kilo. Son muchos los agricultores en estos últimos años los que han decidido apostar por transformar su finca y pasar del olivo al almendro. 

 

La oferta y la demanda de la almendra

La demanda de almendra crece a un ritmo de más de un 5% anualmente y la producción es insuficiente. En España en concreto se importa casi el doble de lo que se produce, es decir, se producen en nuestro país 48.000 toneladas mientras que se importan más de 80.000

 

La almendra: futuro asegurado

La ventaja competitiva de nuestro país es la apuesta por variedades menos comunes (propias de España) y por el cultivo ecológico. España será un país importante en este sector si sigue con esta tendencia de crecimiento e inversión tanto en la investigación como en la apuesta de modernización en las plantaciones de la variedad de regadío. 

La almendra, a diferencia del aceite de oliva, no tiene un sustituto como puede ser el aceite de girasol. Las estimaciones pasan por que la producción global crezca un 50%, hasta 1,8 millones de toneladas anuales, a final de la próxima década. Y antes, para 2024, el número de hectáreas pasará de 1,9 a 2,5 millones.

La inversión está garantizada.